QUINTA DEL 2000 EN EL CEIP CERVANTES

Quintos y quintas del 2000, “añada especial” ya que se trata de la generación frontera entre los denominados “Millennials” y los conocidos como “generación Z” o “postmillennials“, además de primera generación del siglo XXI (ahí es nada…), visitaron el CEIP CERVANTES el pasado día 11 de marzo, día grande para los quintos y quintas.

Cumplieron con viejas tradiciones y otras que lo serán, envueltos en el blanco de la harina y repartiendo magdalenas entre nuestro alumnado, visitando a sus exprofesores y buscándose entre las orlas expuestas en la pared, junto a secretaría.

Esta celebración puede entenderse como un ritual de entrada en la mayoría de edad (18 años).

Ésta siempre será vuestra casa pedagógica. Estamos orgullosos de veros crecer, un abrazo QUINTA del 2000.

PARA SABER MÁS: Extractos de “Historia oral de Ejea” de Octavio Sierra, y “Fiestas y diversiones populares en Ejea de los Caballeros” de Sandra Almárcegui.

“El hecho de quintearse (antiguamente a los 20 años) significaba pasar a ser considerado un mozo más del pueblo. A partir de ese momento se podía entrar en los bailes, en las tabernas, participar en rondas, juegos y bromas. Esto era motivo de alegría y excusa para la celebración y disfrute de todo tipo de actos festivos. Pero también traía consigo ciertas responsabilidades, como colaborar en las fiestas y pagar a los músicos que las animaban.”

“En muchos pueblos era común que los quintos celebraran una semana de fiesta continua, bebiendo y comiendo lo que obtenían de las rondas por las casas, y durmiendo en cualquier sitio.

En Ejea de los Caballeros, tres días antes de -coger la vara- (tallarse para cumplir el Servicio Militar) los mozos rondaban las casas de los quintos, y donde les invitaban a tortas, coñac y vino dulce.”

“Los mozos -cogían la vara- el día que se tallaban; los mozos de la misma telada organizaban bailes y meriendas; las casas -iban por puertas- con sus agasajos; la ofrenda tradicional eran magdalenas, mantecados, vino y licor. -Excusar cien años para gastar un día- era la consigna.”

 

 

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